HISTORIA DE GABRIEL (por opuls)
XANAS
La XANA es un ser legendario, propio de la Mitología asturiana. Es una ninfa de las fuentes, a la que se le atribuye ser poseedora de una gran belleza : un hermoso y escultural cuerpo, unos cabellos muy largos y rubios como el oro, un rostro angelical en el que brillan con una luz especial ,unos ojos azules como las aguas del mar.
Dícese que su mirada tiene tal poder, que todo aquel que la mire a los ojos ,quedará embrujado, hipnotizado de inmediato y sometido a la voluntad de ella.
Cuentan que las xanas salen a bailar a las orillas de los arroyos y de las fuentes, a bañarse en sus aguas cristalinas y cantarinas, y a peinar sus largas cabelleras con peines de oro.
También acostumbran a lavar allí sus ropas y luego las tienden a secar sobre las ramas de los arbustos cercanos.
.Tienen una hermosa y cautivadora voz, con la que cantan unas hermosas y extrañas canciones que atraen, dicen, a los hombres que por allí cerca pasen;y los hechizan con su mirada
y después los hacen sus esclavos.- Esta es la leyenda de las XANAS.
HISTORIA DE GABRIEL
GABRIEL, era un muchacho de 16 años que vivía en una aldea asturiana, situada en un pequeño valle entre altas y verdes montañas, por el que discurría un riachuelo de aguas muy limpias, transparentes, al que iban a parar las aguas de las fuentes y arroyos que nacían en las laderas de los montes próximos.
GABRIEL, había oído muchas veces contar las historias de los sucesos que habían ocurrido a gentes del lugar, que habían osado adentrarse en el bosque, y se habían encontrado con las XANAS. Se contaba que habían regresado con una extraña expresión en el rostro, una sonrisa permanente como de felicidad, y una mirada con ojos extraviados mirando a un punto cualquiera sin ver....
Y picado de la curiosidad, en su cabeza empezó a germinar una idea: quería conocer a una xana y comprobar si era verdad todo lo que se contaba de ellas.
Así que, un día al atardecer, sin decírselo a nadie, ni a sus padres siquiera, cogió una linterna y un palo , y se encaminó decidido hacia un bosque en el que se decía habitaban las xanas.
Según se iba adentrando en el bosque, la oscuridad se iba haciendo mayor en el sendero. Se oía aullar a los lobos allá a lo lejos, cantaban las lechuzas y mochuelos a su alrededor, y los sapos emitían sus metálicos sonidos entre la maleza circundante.
Pero GABRIEL no se arredraba por ello, y aunque tenia miedo, siguió adelante decidido, guiándose por el curso de un arroyo cantarín que de la montaña bajaba.
De pronto, a sus oídos llegó una especie de canto muy melodioso y dulce. Era una voz tan bella la que cantaba, que GABRIEL pensó que no podía salir de una garganta humana.
Guiándose por el canto, se fue acercando al lugar de donde salía aquella voz , y así llegó a un claro del bosque, donde el arroyo hacia un pequeño remanso.
¡Y entonces allí la vio!!. Vio a quien cantaba aquella hermosa canción : era una muchacha bellísima, de cabellos muy largos y rubios, que le llegaban hasta los muslos, y se estaba peinando con algo que brillaba extraordinariamente, como si estuviese hecho de pequeños rayos de luz.
GABRIEL, se quedó quieto en el lindero del claro del bosque mirando extasiado sin atreverse a acercarse ni a decir una palabra.
Pero aquella linda muchacha lo vió y lo llamó haciéndole también un gesto con la mano:
--Ven acércate, no tengas miedo.-dijo.
GABRIEL se acercó tímidamente , y pudo contemplarla con detenimiento; y así vio la
ternura en la mirada de unos ojos azules y limpios como las aguas del océano.
--Dime muchacho ¿ a donde vas? ¿ te has perdido acaso?.-preguntó la chica.
--No, no me he perdido, es que quería conocer a una xana, y he venido por el sendero del bosque a ver si la encontraba.
--Pues ya la has encontrado: yo soy una xana. ¿Estas contento por haberme encontrado?.
--Si mucho.-contestó GABRIEL
--Y que te parezco?...Por cierto..¿Cómo te llamas?.
--Me llamo GABRIEL
--Un nombre muy bonito GABRIEL....Y dime ¿por qué querías conocer a una xana?
--Porque en el pueblo oí decir que erais muy bellas, y que atraíais a los hombres para hechizarlos y luego hacerlos vuestros esclavos.
--Eso dicen GABRIEL?..Pues eso no es verdad. Las xanas no hipnotizamos ni hacemos esclavo a ningún hombre; son ellos los que después de conocernos y estar con nosotras, no quieren volver a sus casas.
Nosotras sólo les cantamos nuestras canciones y les damos mucho amor en la entrega de nuestro cuerpo;.....y ya no quieren irse más,
Y tenemos que obligarles a que se vayan, incluso enfadándonos, porque sabemos que sus mujeres les esperan preocupadas.
--Pues eso es lo que dicen de vosotras.-respondió GABRIEL
--Y tu lo crees GABRIEL?. Mírame a los ojos..
GABRIEL miró a los bellos ojos de la xana, y en ellos no vio nada de maldad, al contrario, en el fondo de ellos había como algo resplandeciente, algo de una dulzura y una transparencia tal, que el muchacho creyó ver el reflejo de otros mundos diferentes al nuestro, y donde todo eran fantasías, placidez, placer y bienestar.
--¿Qué te ha parecido GABRIEL? ¿Qué has visto?.-pregunto la xana.
--Pues he visto...algo maravilloso...que no sé lo que es en realidad..
--Has visto a través de mis ojos el mundo de la fantasía y de la ilusión. Un mundo que no existe, y que es el producto de la imaginación de los seres humanos, en su afán de conseguir algo mejor que lo que tienen. Un mundo donde no haya guerras, ni hambre , ni odio ni rencor, e incluso que no exista la muerte...Es el mundo de la leyenda GABRIEL, y nosotras las xanas somos parte de esa leyenda.
Nos inventaron , como a tantos otros seres de leyenda, para satisfacer el ansia de los humanos de gozar de una existencia feliz, idílica....pero imposible de llevar a cabo.
--Entonces no eres real? ¿No eres de carne y hueso como yo?
--No GABRIEL, no lo soy. Ven, acércate un poco más y tócame..
Así lo hizo GABRIEL, y le tocó la cara con los dedos y pasó la mano por sus hermosos cabellos.
La xana tenia un tacto especial al tocar su piel, muy diferente al de las personas normales. Era como si se acariciase algo sedoso..algo sumamente agradable .Y sus cabellos no daban al tocarlos la misma sensación que los cabellos humanos: parecían hechos de finísimas hebras de oro.
--Que has sentido GABRIEL?.-pregunto la xana.
--Algo muy difícil de explicar xana..Es verdad que no eres como los demás mortales.
--No, no lo soy, yo no soy mortal , ya te dije.
--Y ahora que me has conocido, que has conocido a una xana, quisiera que llevaras un buen recuerdo de mi y que dijeses a todo el mundo lo que has visto aquí, y que no soy una malvada, sinó todo lo contrario, que mi deseo es hacer el bien a todos los mortales, dándoles mucho amor, mucha ilusión y fantasía e imaginación para que puedan ser un poco más felices ,soñando con lo que ellos piensen que seria su felicidad.
Dicho esto , la xana se inclinó sobre el joven y le dio un tierno beso en los labios....
GABRIEL se estremeció al recibirlo porque con aquel beso notó que algo entraba en su cuerpo;,algo que le hizo sentirse muy muy feliz, y con una fuerza para luchar en la vida tremenda.
--.Adios GABRIEL.-dijo la xana-Y no te olvides de mi.Cada vez que te sientas desanimado, y que las fuerzas te abandonan para seguir adelante, acuérdate de mi , y veras como vuelves a sentirte con valor para continuar.
--Adios xana... y gracias por todo.Te visitaré pronto seguramente.
Y GABRIEL emprendió el camino de regreso a su pueblo por el mismo sendero que había recorrido para llegar a la morada de la xana . Pero ya no le pareció que era tan oscuro, ya no oía los aullidos de los lobos en la lejanía, ni el canto lúgubre de las lechuzas y búhos en los árboles, ni el metálico sonsonete de los sapos en los matorrales.-
Todo le parecía más bello, se encontraba más alegre, más ligero y con ganas de cantar. Y dió gracias a la Providencia por haberle concedido el honor de haber hablado con una XANA , y de haber conocido el secreto de esos seres , que son simplemente un mito...una leyenda...una ilusión.
18 oct. 2005.- Gonzalo (OPULS)
0 comentarios